En la reforma de este piso, el requisito principal de nuestros clientes era poder tener un espacio abierto entre cocina y salón. Potenciando el protagonismo de su cocina y consiguiendo así un hogar más funcional y lleno de personalidad.
Un único espacio: salón y cocina
Para poder crear el espacio abierto, eliminamos la pared que separaba ambas estancias. Obteniendo así un único espacio amplio lleno de luz y vida.
Al fondo de este gran salón, justo delante de unos grandes ventanales, encontramos una mesa redonda que encaja perfectamente con el estilo de la vivienda. Y que nos da paso a una acogedora cocina abierta.
Una cocina abierta llena de personalidad
Una cocina abierta, funcional y llena de personalidad. Desde la puerta de entrada, nos invita a disfrutar de una agradable conversación con la familia o amigos, a servirnos una copa de vino mientras se termina de hacer la comida o a tomar un café sentado en los taburetes que acompañan la isla.
La isla con barra es clave en esta vivienda. Además de ser un punto focal en la estancia, también permite aumentar la funcionalidad y la eficiencia de la cocina gracias a su colocación estratégica.
Sobre ella, encontramos un grifo y dispensador cromado de Blanco, que junto al fregadero lacado en el mismo color beige que los muebles, aporta el contraste perfecto a la isla.
Detrás de ella, en el lineal de cocina, encontramos el horno y microondas de Balay, así como la placa de cocción o la campana con cristal negro de Pando. El elemento metálico que permite colgar los utensilios de cocina e incluso tener una pequeña planta, le aporta un interesante toque moderno a la cocina.
Combinaciones con un toque rústico
Todos estos electrodomésticos y complementos, se encuentran arropados por muebles con frentes enmarcados junto con unos clásicos tiradores que le aportan un toque de tradición y calidez al espacio. Así como la madera en grano claro que se ha usado tanto para las encimeras como para el revestimiento de la pared.
Por último, para cerrar este espacio, incluimos un mueble de persiana que nos permite ocultar aquellos pequeños electrodomésticos, como la máquina de café o el tostador, que no siempre queremos tener encima de la propia encimera.
A nivel diseño se ha creado un interesante contraste entre los elementos más tradicionales, como los muebles con los frentes enmarcados, y las líneas simples y modernas de esta cocina. Además, los diferentes colores, formas y texturas que encontramos en cada rincón de este espacio y que aportan un carácter singular.
Separando espacios con papel pintado
Otro elemento a destacar es el papel pintado de las paredes. Este elemento, colocado estratégicamente, nos permite separar los espacios, sin necesidad de usar paredes. Y es que, al estar distribuido en la pared central, envuelve desde la zona de cocina hasta el comedor.
El uso del papel pintado es cada vez más frecuente en muchas cocinas. Nos aporta ese toque especial, obteniendo un espacio con personalidad, único y con mucho estilo.
Con todo esto, la cocina ha dejado de ser un lugar aburrido y apartado de la casa. Ahora queda perfectamente integrada con el salón y es el corazón de esta vivienda.
En definitiva, una gran cocina, y reforma integral, que refleja la personalidad y carácter de sus propietarios.